Después de 14 años Pénjamo recupera su alberca semiolímpica: un espacio que vuelve a la vida

Pénjamo, Gto.- La tarde de este lunes, Pénjamo escribió una nueva página en su historia con la inauguración de la alberca semiolímpica, un espacio que permaneció en el abandono durante casi década y media y que por años fue visto como un recordatorio de lo que no debía pasar en la obra pública.

Hoy, ese “elefante blanco” finalmente vuelve a la vida y regresa renovado, digno y vibrante a las familias penjamenses. El emotivo evento fue encabezado por la presidenta municipal Yozajamby Molina, acompañada de integrantes del Ayuntamiento y la directora general de CODE Guanajuato, Yendy Cortinas López, quienes coincidieron en que este logro representa más que una obra: simboliza la recuperación de la confianza y el orgullo por lo nuestro.

Ante cientos de personas congregadas en el recinto y durante su mensaje, la alcaldesa dirigió sus palabras a la ciudadanía con un sentimiento claro de compromiso: “Aquí es Pénjamo, aquí cumplimos. Esta alberca no volverá a cerrar sus puertas durante mi gobierno”, afirmó destacando que el espacio, que un día fue construido en condiciones inadecuadas y sobre un predio particular, hoy se levanta como un lugar de encuentro, aprendizaje y bienestar para todas las edades.

Por su parte, la directora de CODE resaltó que obras como esta posicionan a Guanajuato como un referente nacional en infraestructura deportiva. Reconoció también el esfuerzo conjunto que permitió transformar un problema histórico en un motivo de celebración.

Los trabajos de recuperación se realizaron mediante la Remodelación de la Alberca Semi-Olímpica y Obras Complementarias, con una inversión de 11.8 millones de pesos aportados en un 60% por el gobierno municipal y 40% por el gobierno estatal.

La intervención incluyó la rehabilitación total del edificio: trabajos preliminares, reforzamiento estructural, renovación del vaso semiolímpico de 15 x 25 metros (capacidad de 600 m³), modernización de instalaciones hidrosanitarias y eléctricas, nuevo cuarto de máquinas con sistemas de filtrado y monitoreo en tiempo real, rehabilitación de acabados y fachada, así como la instalación de 160 colectores solares y obras de acceso, estacionamiento y limpieza general.

Acciones que, en conjunto, materializan los principios de dignificación del espacio público, bienestar social y recuperación del patrimonio comunitario que impulsa la actual administración.

Hoy, después de 14 años, la alberca vuelve a llenarse de agua… y de vida. Vuelve a llenarse de niñas y niños aprendiendo, de jóvenes entrenando, de familias conviviendo. Vuelve a ser ese lugar que Pénjamo merecía. Porque hoy, con orgullo y convicción, podemos decir: aquí es Pénjamo… y aquí las obras regresan a la gente.